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Alcázar Toledo

Publicado por Laura Prieto Fernández

El Alcázar es una de las construcciones arquitectónicas más destacadas de la ciudad de Toledo; vinculado a la historia de la urbe desde los tiempos de Imperio Romano se ha ido actualizando con el paso de los años y en la actualidad es uno de las insignias más destacables de la ciudad castellano manchega.

Parece ser que la primera construcción que ocupó el alto de la colina donde hoy se encuentra la famosa edificación era de época romana, concretamente del siglo III; allí se levantaría un pretorio que después sería ocupado por los visigodos. Durante este periodo se utilizó como residencia real y con esta misma función será utilizada por los musulmanes quienes realizarían en ella algunas reformas.

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A Lo largo de la reconquista el Alcázar fue ocupado por los monarcas españoles, especial atención merece Alfonso X El Sabio quien estaba muy vincula con la cuidad y las culturas que en ella habitaban. Seria este monarca quien mandaría construir las torres cuadrangulares que hoy se encuentran en las esquinas del edificio.

La idea que nosotros tenemos en la actualidad del Alcázar se debe al emperador Carlos V quien decidió derruir la antigua construcción medieval y levantar en su lugar una resistencia regia que mostrara el poder del monarca.

La construcción comenzó a realizarse en 1545 y el arquitecto Alonso de Covarrubias fue el encargado de establecer la nueva planimetría y supervisar las obras. Apenas quedaron algunos restos de la antigua fortificación en la facha occidental. El palacio se construyó a lo largo del siglo XVI y es por ello por lo que en cada una de sus fachadas se hacen patentes los distintos periodos del renacimiento español.

También intervinieron otros arquitectos como Villalpando que trabajo en el patio y el famoso Juan de Herrera, autor del Escorial, que remodelo completamente el ala meridional y modifico las torres con tejados y chapiteles que otorgan al conjunto un aspecto más serio y riguroso.

El acceso principal está realizado a partir de una arquería de medio punto que ha sido almohadillada para otorgar mayor plasticidad; el conjunto aparece completado por el escudo del emperador y las esculturas de los monarcas Recaredo y Recesvinto.

El patio fue construido en torno a 1550 y se configura a través de una doble galería superpuesta con arcadas de medio punto sustentadas por columnas que siguen los cánones clasicistas en la composición de órdenes. En el centro del mismo se levantaba una esplendorosa pieza escultórica que representaba al emperador y que era obra de Pompeyo Leoni.

A lo largo de su historia ha sufrido numerosas vicisitudes, como el incendio durante la guerra de sucesión, el asalto de las tropas napoleónicas durante la guerra de la independencia, otro incendio en el siglo XIX… Debido a ello la construcción quedó en un estado realmente precario por lo que a mediados del siglo XX se emprendió su reconstrucción y rehabilitación.

En la actualidad alberga la biblioteca de la comunidad autónoma y actúa como museo del ejército además de ser cripta y uno de los lugares más visitados de la ciudad de Toledo.