Arte
Inicio Escultura Penélope de Bourdelle

Penélope de Bourdelle

Publicado por A. Cerra
Penelope de Bourdelle

Penelope de Bourdelle

Esta escultura la realizó el artista francés Antoine Bourdelle entre los años 1905 y 1912, y como otras muchas de sus obras se encuentra expuesta en el Museo Bourdelle de París.

Este bronce es un buen ejemplo de su producción escultórica, que está considerada como el máximo exponente del estilo humanista que se dio entre finales del siglo XIX y los comienzos del XX.

De hecho, todas sus obras se fijan siempre de una forma muy innovadora en la figura humana, como también se puede ver en otros bronces suyos como Herakles arquero. Incluso algunos críticos e historiadores del arte han llegado a decir que sus esculturas tenían vocación de seres humanos.

Emile Antoine Bourdelle (1861 – 1929) fue discípulo del gran Auguste Rodin, y además de mantener con él una relación profesional y artística, también fueron buenos amigos. Sin embargo, Bourdelle fue uno de los primeros artistas que rompieron con su estilo de una escultura preferentemente óptica. Y opta por unas formas que se basan mucho más en la masa y en los volúmenes.

Además, Bourdelle se inspira mucho más en las esculturas clásicas, tanto en la forma como en los temas, ya que no es extraño que realice figuras de los dioses y personajes de la mitología grecolatina, como es el caso de esta Penélope, la paciente esposa del aventurero e infiel Ulises.

Penélope es un personaje que aparece en la Odisea de Homero, y había sido representada artísticamente en numerosas ocasiones. Sin embargo, él plantea una iconografía nueva para el personaje. Porque generalmente aparecía hilando y siempre llevando el huso con la lana, ya que según el relato homérico, la mujer esperaba a su marido, tejiendo un tapiz de día y destejiéndolo de noche, ya que si lo acababa tendría que atender a otros pretendientes que querían casarse con ella, sin embargo ella se niega a dar por perdido a Ulises, a quién espera a que vuelva a Itaca de la guerra.

Pero volviendo a las formas de la escultura, se trata de una figura rotunda, casi tiene la apariencia de una robusta columna. De hecho, el aparecido con ese elemento arquitectónico se refuerza con los pliegues de su falda que recuerda las estrías y acanaladuras que recorren las esculturas de los órdenes clásicos.

En vez de trabajando en su tapiz, Bourdelle nos muestra a la mujer en una actitud reflexiva. Parece más una pensadora, lo que vendría a ser una especie de contrapartida femenina al famoso Pensador de Rodin.