Con el arco negro de Kandinsky
Se trata de una obra pintada en el año 1912 por el pintor ruso Wassily Kandinsky, y en la actualidad forma parte de la colección de arte contemporáneo del Centro Georges Pompidou de París.
Kandinsky fue todo un revolucionario del arte a comienzos del siglo XX y está considerado como el precursor del arte abstracto con su obra Primera acuarela abstracta. No obstante, hay que decir que Wassily Kandinsky llegó al arte de la abstracción pero tras un largo periodo en el que sus obras fueron de estilo expresionista, el estilo emergente en Alemania, más concretamente en Munich donde vivía por aquel entonces.
Es decir, su proceso para llegar a la representación abstracta fue partiendo de la emoción, de sus propios sentimientos, ya que él toma un rasgo de la realidad y en su mente y en la tela iba transformando esa carga sentimental en otra cosa, bien distinta y por supuesto, tremendamente novedosa.
Hay que decir que la doctrina del Expresionismo propugnaba en sí misma la experimentación. Según esa doctrina, lo único importante en el arte, no era la imitación de la naturaleza, sino la expresión de los sentimientos a través de una selección de líneas y colores. A partir de ello, Kandinsky llegó a la reflexión de que ¿no sería más puro el arte suprimiendo todo lo referente al tema, a la naturaleza, y basarse únicamente en la creación de efectos de color y de forma?
Ese fue el punto de partida que inspiró a Kandinsky para llegar al arte abstracto. Hay que decir, que el artista ruso, como muchos otros pintores contemporáneos, en realidad era una especie de peculiar místico que aborrecía la vorágine de progreso y ciencia que estaba invadiendo a la sociedad de las primeras décadas del pasado siglo XX, y él era un firme partidario de emprender la regeneración del mundo por medio de un nuevo arte de pura interioridad.
De hecho, todas las reflexiones que le llevaron a concebir el arte abstracto las reflejó en su libro De lo espiritual en el arte, cuyo título ya nos puede dar idea del carácter de sus textos. Ahí se encuentran todas las claves para comprender sus procesos mentales y artísticos. Por ejemplo, él destaca los efectos psicológicos que provocan en el espectador los colores puros y en muchas ocasiones los relaciona con sonidos musicales. Desde ese punto de vista, plantea sus obras como experimentos que le lleven a crear una música cromática, donde cada color sea un instrumento.
De todo lo dicho se deduce que el camino que siguió Kandinsky para llegar a un movimiento artístico como la Abstracción no fue una mera casualidad, sino que llegó hasta ahí tras un largo proceso de reflexión sobre su pintura, y aunque en su momento causó una enorme polémica su obra, criticada por unos y alabada por otros, lo cierto es que él fue quien abrió una de las vías artísticas más exploradas hasta la actualidad, y él fue el primero de una larguísima lista de pintores en los que la imitación de la naturaleza ha desaparecido por completo, es decir, él se inventó la llamada pintura no figurativa, y sin su presencia en la Historia del Arte sería inconcebible la pintura o el diseño gráfico actual.