Salon des Cent de Alfons Mucha
Este cartel de la convocatoria de exposición para el Salon des Cent de 1896 en Paris se ha puesto en más de una ocasión como exponente de toda una época creativa y social: la Belle Époque, un periodo comprendido en Francia entre 1890 y 1914, si bien esa denominación es posterior porque se vino a llama la “bella época” precisamente después de que acabará la Primera Guerra Mundial.
La comparación está clara. Desde la pobreza y tristeza que trae una guerra, se veía que el periodo anterior era todo alegría, además de que fue un tiempo de prosperidad económica y de evidente eclosión cultural de la que surgieron todos los movimientos postimpresionistas y las primeras vanguardias.
Las manifestaciones culturales se multiplicaban y fruto de ello es una amplísima colección de carteles, en cuya creación participaban grandes artistas y verdaderos especialistas en el género como el checo Alfons Mucha que realizó infinidad de cartelería, para todo tipo de productos. Unos carteles que hoy son obras de arte, ya que algunos de los ejemplares que se conservan hoy en día se muestran en los museos, como en este caso, o se enseñan en las academias de dibujo y de diseño como auténticos referentes.
De algún modo, los carteles traducían a un medio más popular todas las tendencias artística. En ellos aparecían enfoques similares a los que se hacían con un arte emergente como la fotografía, o se establecían paralelismos entre el arte occidental y las imágenes de inspiración oriental. Al igual que se volcaban estilos estéticos como por ejemplo el Modernismo o Art Nouveau, con el cual podemos ligar a Alfons Mucha debido a su espíritu ornamental y esas características líneas de dibujo sinuosas, rítmicas y continuas que envuelven por completo las manchas de color.
Un tipo de imágenes que hoy en día, más de 100 años después tienen una vigencia innegable. Cuando por ejemplo nos referimos a un estilo vintage, inmediatamente los podemos relacionar con este tipo de carteles de Mucha e incluso en el ámbito turístico estos recuerdos de la Belle Époque siguen siendo un reclamo en muchos atracciones de París.
Así que definitivamente este cartel de Mucha y otros de aquel momento creativo, en principio eran simples papeles ilustrados y destinados a ser pegados temporalmente en una pared de la calle o sobre una puerta. Sin embargo hoy en sus formatos de grabados o de litografías cuelgan en los más prestigiosos museos, como en este caso, ya que hay del cartel del Salon des Cent de 1896 hay una copia en estupendo estado de conservación en MoMA de Nueva York.