Payasa Cha U Kao, Toulouse Lautrec
Realizada en óleo sobre cartón La payasa Cha U Kao es una de las obras más intimistas del pintor postimpresionista Toulouse Lautrec. Este genio pictórico de finales del siglo XIX fue una de las figuras más conocidas de la sociedad parisina no sólo por su capacidad creativa sino también como uno de los imprescindibles de la noche de París.
Henri Toulouse Lautrec nació en 1864, en el seno de una importante familia de la alta nobleza francesa. Su salud fue precaria a lo largo de su vida y quizás condicionada por la endogamia de sus progenitores, sus padres eran primos carnales casado juntos para procurar la limpieza de su apellido. Lautrec se trasladó a París para estudiar pintura y allí entró a formar parte del taller de Bonnat primero y de Cormon después; precisamente en el taller de éste Lautrec entabló amistad con Vicent Van Gogh.
Su producción artística estaba condicionada por el ambiente nocturno y urbano de París. Cuando se trasladó al barrio de Montmartre descubrió la vida nocturna, un continuo referente en su obra; Lautrec apartó su producción los tradicionales cuadros de paisajes naturales para centrarse en la vida de los cabaret, bailes de salón y bares nocturnos. Se convirtió en un auténtico cronista de esta época y trabajó como cartelista para algunos de los locales más destacados de la ciudad.
En esta ocasión Toulouse Lautrec ha combinado dos de sus grandes referentes en un solo retrato: el circo y el mundo del cabaret. La payasa Cha U Kao es una de las musas del artista, retratada en numerosas ocasiones por el artista parisino. Siguiendo la moda de la época la peculiar artista se disfrazaba según la moda japonesa para llevar a cabo un espectáculo en el combinaba acrobacias con bailes.
Cha U Kao sirvió de modelo al artista en diversas ocasiones y su espectáculo fue uno de los que más representó el pintor postimpresionista, sin embargo esta vez el artista ha optado por una escena más intimista: el espectáculo aún no ha empezado y Cha U Kao está en su camerino preparándose para el show.
Es evidente la fortísima influencia de la cultura japonesa en la obra de Lautrec, la planitud del lienzo remite a las tradicionales estampas japonesas que ya habían servido de precedente a otros artistas como Manet. Quizás la temática del espectáculo y sus entresijos pueda entroncar con uno de los artistas que más admiraba Lautrec, Degas.
Cha U Kao aparece representada con un amplísimo tutú de color amarillo que trata afanosamente de abrochar alrededor de su cintura, lleva una gran peluca blanca y aparece sedente en una especie de sofá o banco corrido de color rojizo. El cromatismo otorga viveza a la composición, la obra es dinámica de por sí pese a la pesadez y tranquilidad que nos trasmite el personajes. La escena se completa con la presencia de una figura masculina cuyo reflejo asoma por el espejo del camerino.
Actualmente la obra del artista postimpresionista se encuentra en el Museo De Orsay de Paris.
