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Capa o túnica triunfal sioux

Publicado por A. Cerra

Capa sioux

Todos hemos oído hablar de los indios sioux de Estados Unidos, especialmente debido al cine. Y también por el cine tenemos muchos estereotipos sobre ellos, aunque en realidad son unos grandes desconocidos. Un buen ejemplo de ello es el desconocimiento de sus manifestaciones artísticas, como es el caso de esta enorme capa o túnica pintada sobre una piel de búfalo.

Este tipo de capas las vestía un guerrero y en ella se relataba su vida. En la que aquí nos ocupa, que en la actualidad posee el Musée du Quai Branly de París, la podemos leer de derecha a izquierda, y comenzando desde la parte superior. Si bien está claro que este tipo de objetos rituales ahora solo los podemos leer y eso hace que su interpretación total sea prácticamente imposible, ya que alcanzaban todo su esplendor acompañados de la narración de cada episodio presentado en la piel.

De hecho la piel la vestía en momentos puntuales el guerrero, pero habitualmente estaba extendida. Por ello se contemplan en los bordes los diversos agujeros que se le practicaban para extenderla y tensarla. Así primero se secaba la piel, la cual posteriormente se debía ablandar, curtir y finalmente pintar.

Con las diferentes figuras vemos todo lo que era importante en la cultura de los sioux. Por ejemplo se ven abundantes caballos, un animal que era mucho más que un medio de transporte para ellos. Era casi un hecho cultural con relevancia social y de gobierno. Y hay que pensar que los sioux no dispusieron de caballos hasta el siglo XVII, cuando fueron introducidos por los españoles. Pero rápidamente los dominaron y supusieron un importantísimo recurso para ampliar sus territorios y la caza en las grandes llanuras norteamericanas, donde abundaban los búfalos.

Por supuesto también aparecen numerosas figuras humanas, todas ellas de trazos muy simples, casi perfiladas. Y en muy escasas figuras se ven los grandes de sus rostros. En realidad cada personaje es prácticamente un torso triangular, unos brazos extendidos, unas piernas dobladas y una cabeza con una cabellera que sirve para identificar a los sioux. Por cierto otros también llevan un tocado de plumas, el cual solo portaban los grandes jefes, y estos tocados a su vez también llevarían elementos decorativos recordando sus grandes batallas.

Este tipo de pieles de búfalos fueron el soporte del arte sioux desde finales del siglo XVII hasta prácticamente los comienzos del pasado siglo XX. Sin embargo es curioso comprobar que con sus derrotas y también con la reducción de las manadas de búfalos, los sioux comenzaron a realizar este tipo de relatos gráficos en otros soportes, como por ejemplo los libros de contabilidad que llegaban a sus manos.