Arte
Inicio Impresionismo, Pintura Entrada de luz por la ventana de mi estudio de John Lavery

Entrada de luz por la ventana de mi estudio de John Lavery

Publicado por A. Cerra

Entrada de luz por la ventana de mi estudio de John Lavery

Esta obra del artista irlandés Sir John Lavery se encuentra en el Museo del Ulster de Belfast. Un curioso museo en la capital de Irlanda del Norte con una colección de lo más variopinta. Allí podemos ver desde restos paleontológicos hasta el tapiz más largo del mundo hecho recientemente con motivo de la serie de televisión Juego de Tronos que se ha grabado en una gran parte en territorio irlandés.

Además de eso, en el museo hay una importante colección histórica que incluye elementos como el tesoro hallado en uno de los barcos de la Armada Invencible que naufragó cerca de esta costa. Y por supuesto, el Museo del Ulster es un buen lugar para conocer la historia del arte de Irlanda.

En ese apartado es donde se incluye el conjunto de obras de John Lavery (1856 – 1941), un artista que en vida donó más de una treintena de obras al museo por dos motivos. Primero porque él había nacido en Belfast, y segundo porque su ciudad se había preocupado por construir una galería de arte pero tan apenas tenía obras que exponer.

Entre esas obras está este gran lienzo titulado Daylight raid from my studio window. Un cuadro que tiene un subtítulo que nos da la clave para comprender esa imagen. Ese subtítulo es “7 de julio de 1917”.

Por esa fecha sabemos que el cuadro representa el estudio de Lavery en Londres, y también sabemos que nos remite a un día en la capital británica durante la Primera Guerra Mundial.

Es decir, nos está planteando una escena que es todo lo contrario a los bombardeos que por entonces estaba sufriendo Londres. Vemos un amplio estudio de trabajo iluminado por una potente luz natural. Pero sin embargo, la nota de pánico la pone la muchacha que vemos de espaldas. Una chica que se asoma a la enorme ventana y parece preguntarse qué les va a deparar ese día.

Además de la tensión palpable en la figura de la joven, el cuadro también destaca por su habilidad para capturar la luz y el espacio. La luz que entra por la ventana no sólo ilumina el interior del estudio, sino que también se refleja en las superficies y crea un ambiente lleno de vida y energía. Esta representación de la luz es un rasgo característico del impresionismo, movimiento al que Lavery estaba muy vinculado.

El estudio de Lavery, representado en la pintura, era un lugar de encuentro para artistas, escritores y políticos de la época. A pesar de la guerra, el estudio se mantuvo como un oasis de creatividad y discusión intelectual. La pintura, por lo tanto, también puede verse como un tributo a la resistencia del espíritu humano en tiempos de adversidad.

Sin duda es una referencia a la guerra de lo más elegante. En realidad, tan elegante como todo lo que hizo este pintor que alcanzó un enorme éxito en su tiempo. En especial como retratista, ya que para él posaron toda la aristocracia británica de finales del siglo XIX y comienzos del XX. Los personajes poderosos de la época quedaban encantados con esos retratos en los que Lavery se manifiesta como un buen seguidor del Impresionismo, y en especial de artistas como Whistler.

Pero además de por su maestría para el arte, Lavery también fue un personaje muy respetado por sus actitudes sociales y políticas, de hecho llegó a participar muy activamente en las conversaciones que llevaron a la paz entre Irlanda y Gran Bretaña en 1921. Su compromiso con la paz y la justicia social se refleja en su arte, que a menudo aborda temas de relevancia social y política.