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Retrato de Savonarola

Publicado por A. Cerra

Retrato de Savonarola

Aquí tenemos un cuadro que nos presenta la imagen de un personaje muy importante en el desarrollo de ideas del Renacimento italiano, y sobre todo el que se desarrolló en la ciudad de Florencia. Hablamos del monje Girolamo Savonarola, el cual aparece retratado en esta obra de 1524. Un cuadro que hizo el pintor de Brescia Alessandro Bonvicino conocido como “El Moretto” y que en la actualidad se expone en el Museo de Castelvecchio de Verona.

En realidad, tenemos decir que no hay total seguridad de que el retratado sea Girolamo Savonarola. Es cierto que hay una inscripción en la parte baja, pero no es bien legible. Y también es cierto que los rasgos y la actitud vinculan a este personaje encapuchado con el famoso fraile. Pero como decimos no hay una certeza absoluta de que sea él.

Lo que sí que es cierto es que este monje de ideas bastantes radicales había llegado a Brescia, la ciudad del pintor, en el año 1489. Y allí había predicado en diversas ocasiones. Algo que siempre solía tener tintes trágicos. De hecho, proclamó que la ciudad iba a tener que resistir una gran calamidad. Además se sabe que el Moretto fue un personaje muy piadoso y estaba convencido de que era necesaria la profunda reforma en la iglesia que proclamaba aquel fraile.

Así que tiene sentido que con este óleo planteara su tributo a este monje de fuerte carácter e ideas convencidas, tal y como plasma ese rotundo rostro de rasgos perfectamente definidos. Un cara que atrae totalmente la atención del espectador, ya que es el punto más luminoso de la tela, al encontrarse completamente rodeado por el tono oscuro del hábito monacal. Y además nos lo presenta como un mártir, ya que eso viene simbolizado por la palma que lleva en su mano.

Por otra parte hay que decir que cuando el artista realizó este cuadro, el monje ya llevaba unos cuantos años muerto, porque fue excomulgado y quemado en la hoguera en el año 1498. Es decir, que es muy posible que Alessandro Bonvicino ni siquiera lo hubiera visto en persona, durante su estancia en Brescia. Por lo que se cree que quién posó para esta obra sería un monje agustino de la ciudad que seguía las ideas de Savonarola. Un tal Inocencio Casari, que además se sabe que encargó varias obras a este mismo pintor para la iglesia de San Juan Evangelista.

No obstante, sea un retrato-homenaje a Savonarola o no, lo cierto es que la tela tiene una calidad relevante. Y en ella se ve clara la influencia de la escuela pictórica de Venecia, y más concretamente de los seguidores del arte de Giorgone.