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El Palacio Real de Kuala Kangsar

Publicado por A. Cerra

Istana Iskandariah o Palacio Real de Kuala Kangsar

El Istana Iskandariah situado en la ciudad de Kuala Kangsar de Malasia es todavía hoy el Palacio Real del Sultanato de Perak y la residencia oficial de tal mandatario. Es así, desde que se culminó su construcción en el año 1933, gobernando el sultán Iskandar Shah Ibni Almarhum, a quién debe su nombre.

El palacio fue construido en una colina en la parte más alta de la ciudad, ya que la residencia de los anteriores sultanes se encontraba a orillas del río que atraviesa Kuala Kangsar, y ese emplazamiento a la larga provocaba muchos problemas de humedades y sobre todo de inundaciones durante la estación lluviosa del monzón. Así que tras una de esas riadas devastadoras se decidió ubicarlo en un punto más alto, precisamente junto a otro palacio importante en la ciudad, el antiguo Palacio de Estado o Istana Negera levantado a finales del siglo XIX.

Arquitectónicamente hablando el Palacio Real de Kuala Kangsar plantea la habitual mezcla de influencias típica de la arquitectura colonial del Sudeste Asiático o de cualquier otra zona del mundo. En este caso fusiona elementos europeos con otros propios de Asia e incluso del Oriente medio. Esa es la razón de que un mismo inmueble puedan convivir los arcos góticos propios del gótico medieval con las cúpulas en forma de cebolla o los esbeltos minaretes que recuerdan la arquitectura de las mezquitas.

Por cierto, esas cúpulas marcan desde fuera la estructura y los diversos pabellones componen la totalidad del complejo residencial. En él hay diversos salones y salas de uso protocolario. Además, están las estancias más íntimas de la familia real, que también cuenta con salones y salas para un disfrute más personal y alejado de los despachos y audiencias oficiales.

Se trata en total de una amplia superficie repartida en tres pisos, que durante gran parte del siglo XX ha seguido creciendo. Pero eso sí, manteniendo la estética colonial de sus orígenes, pareciendo todo de un mismo momento constructivo.

En realidad, todo en la ciudad mantiene esa peculiar atmósfera de cuento oriental y de ciudad que materializa todos los iconos tópicos de los sultanes asiáticos. Y de hecho, el conjunto patrimonial de Kuala Kangsar es más que destacable entre las ciudades de Malasia, ya que allí también hay edificios tan interesantes como la deslumbrante Mezquita Ubudiah, la Galería Sultán Azlan Shan, o el Istana Kenangan transformado hoy en día en Museo Real. Por no hablar del Puente de Iskandariah una obra contemporánea al Palacio Real del Sultanato de Perak.