Disco Tensione de Gianfranco Meggiato
Esta escultura de Gianfranco Meggiato está realizada en metal, ya que es una fundición de aluminio con magnesio a la que también se le añadió alguna pieza de acero inoxidable en forma de reluciente esfera central. Sin embargo por su textura y en especial por el pintado en negro posterior se ha logrado evocar la piedra volcánica. Algo muy importante para comprender el significado de la obra, la cual pretender ser una metáfora de la vida, la cual se nos presenta como un duro laberinto.
No obstante, mediante la reflexión y la constancia el escultor italiano quiere mostrar que hay una salida. Una salida que tal vez no esté en el exterior. Todo lo contrario se puede hallar en el interior de cada cual, en los sentimientos más personales e íntimos de cada persona. Eso precisamente representa la esfera central de acero inoxidable. La cual también con su brillo y formas pulidas viene a ser una materialización de la esencia, lo más valioso del ser.
Además la obra de este artista de origen veneciano y nacido en el año 1963 también se caracteriza por acoger siempre mensajes y simbolismos que debe descifrar el espectador. Propone que se haga no solo una mirada estética a las formas de sus esculturas. También invita a reflexionar sobre esas formas y buscarle el significado oculto. Por ejemplo aquí establece una paradoja ya que ese intrincado laberinto duro y negro puede suponer una ocasión propicia para cambiar, mejorar y crecer. Eso sí, buscando en nuestros pensamientos y sensaciones. Tiene algo de espiritual que permite que elevarse sobre el torbellino y el lío del día a día, para hallar lo importante y esencial.
De hecho, los problemas y las complicaciones las considera necesarias para el crecimiento interior. Solo siguiendo y superando todo ese enjambre de formas se llega a la esfera central, un camino que nos hace más fuertes y nos prepara para alcanzar la luz.
De alguna forma esto tiene mucho que ver con sus vínculos con el Renacimiento italiano. No tanto en lo formal, ya que su arte pese a ser muy orgánico tiende a la abstracción. Pero la filosofía es muy humanista. Siempre propone que el ser humano es capaz de elevarse, creer y cambiar su destino. Él, al igual que se puede ver en iconos del arte renacentista como El hombre de Vitrubio, también coloca al género humano en el centro de todo.
Tal vez por ese espíritu vitalista Gianfranco Meggiato es un artista muy cotizado en la actualidad. Sus creaciones y sus instalaciones suelen tener un carácter monumental y se encuentran repartidas por muchas ciudades y museos del mundo.