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Formas circulares, Sol número 2, de Delaunay

Publicado por A. Cerra
Formas circulares, Sol nº 2 de Delaunay

Formas circulares, Sol nº 2 de Delaunay

Esta obra de Delaunay fue una de las creaciones que realizó entre los años 1912 y 1913 y que dieron lugar al denominado Cubismo Órfico u Orfismo, tal y como lo denominó el escritor de la época Guillaume Apollinaire.

En la actualidad esta obra se encuentra en el Centro Georges Pompidou de París y forma parte de la serie en la que Robert Delaunay realizó sus primeras pinturas de carácter no figurativo, al mismo tiempo que rompía con las estructuras de inspiración cubista que se basaban en la presencia de objetos reconocibles.

Se trata de un conjunto de obras en las que todo se estructura a partir del movimiento circular de las formas. Una configuración formal que atraía otros significados y que a su vez está muy relacionado con el propio acto de pintar.

Delaunay improvisaba sus obras pintando directamente sobre el lienzo, pensaba que la estructura se iba generando a sí misma. Además estaba convencido de que la generación circular de la luz era el principio fundamental de todo lo existente. Es decir, con esas formas iba creando estructuras de color densamente entrelazadas y de modulación muy compleja.

En realidad, el estilo del Orfismo que se inventó Delaunay (1885 – 1947) parte de ciertos principios del arte cubista. En sus primeros años de juventud sido cautivado por las estructuras que pintaba Paul Cézanne, quién con sus obras postimpresionistas en las que representaba naturalezas muertas estaba dando las claves para la futura pintura cubista.

De hecho, desde 1908 Delaunay pintó varias obras como Saint Severin o Torres de Laon con una clara influencia de Cézanne. Sin embargo, a partir de 1912 incorpora a sus pinturas un elemento clave para su concepción artística: el disco, el círculo. Una forma curva que ya le empieza a distanciar del Cubismo más estricto, además de que Delaunay no practicó nunca el análisis excesivamente como si hicieron grandes pintores cubistas como Georges Braque, autor de obras como Paisaje de L’Estaque y fundador junto a Pablo Picasso del Cubismo.

En cierta forma, Delaunay tiene mucho más de arte abstracto que de cubista.

Si bien tras esos años en los que pintó algunas de sus obras maestras, la verdad es que a partir de 1914 entró en una profunda crisis creativa, y hasta la década de los años 30 su arte no alcanzaría un alto nivel. Unos momentos en los que ya está plenamente decantado por las formas más abstractas, combinando discos con anillos concéntricos de gran rigidez en cuanto al color.

Es decir, Cézanne, Cubismo, Abstracción, más la influencia del Futurismo, configuran el Orfismo, cuyo elemento más relevante son las formas curvas de colores enfrentados para alcanzar gran potencial expresivo.