La gallina ciega, Goya
La gallina ciega, también conocido como El Cucharón es uno de los cuadros más populares del artista Neoclasicista Francisco de Goya y Lucientes no obstante y pese a su datación, el lienzo tiene poco de neoclasicista más bien es una obra de estilo y tema rococó en la que el artista demuestra su valía y el hecho de que Goya fuese el precursor de la pintura moderna. Francisco de Goya y Lucientes (1746 – 1828), más conocido sencillamente como Goya, es una de las figuras artísticas más relevantes de la pintura española de todos los tiempos. Pintor y grabador a partes iguales, la pintura de Goya supuso un punto de inflexión en el arte y entre su producción se pueden diferenciar tanto obras ancladas en la tradición como una innovación absoluta que no se había presentado en España hasta entonces.
Tras unos primeros años de aprendizaje en su Zaragoza natal y su posterior viaje a Italia donde conoció la pintura de los grandes maestros del Renacimiento italiano, Goya se establece en Madrid al amparo de su cuñado Francisco Bayeu quien paulatinamente le consigue un puesto en la corte y lo introduce en la Real Fábrica de Santa Bárbara. Es precisamente para la Fábrica de Tapices para quien Goya realiza el lienzo que aquí nos ocupa, no se trata sino de un cartón es decir, un boceto previo al tapiz que se realizaba en lienzo para poder tejer posteriormente el tapiz. En realidad, el cartón de La Gallina Ciega fue el único de los cartones pintados por Goya que llegó a convertirse en tapiz. Éste estaba destinado a decorara las paredes de la habitación de las infantas en el Palacio de El Pardo de Madrid.
Mucho se ha especulado acerca de la datación de este lienzo, algunos autores y críticos de arte han datado la obra en el año 1788 año en que Carlos IV accedió al trono tras la muerte de Carlos III, otros sin embargo retrasan la fecha algún tiempo pero en cualquier caso, siempre antes de diciembre de 1789 cuando el artista fue nombrado Pintor de Cámara. La obra representa uno de los juegos más conocido de la época La Gallina Ciega o El cucharón, que consistía en hacer un círculo en torno a una persona central que con los ojos vendados debía tocar con un gran cucharón a los integrantes del círculo mientras éstos bailaban y danzaban a su alrededor.
En el lienzo encontramos algunos personajes ataviados con los típicos trajes de majos y majas pero son personajes aristócratas que en la época adoptaron la vestimenta de las clases más bajas de Madrid; otros aristócratas sin embargo aparecen ataviados a la francesa. En todos ellos el artista destaca la calidad táctil de las telas y un sutil uso de los colores. Goya ha representado la alegría y el juego de los personajes despreocupados que disfrutan de un paraje natural y al aire libre a la orilla de un río que seguramente sea el Manzanares.
En la actualidad el lienzo se conserva junto a un boceto algo anterior en el Museo del Prado de Madrid.