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Retablo de Sijena

Publicado por A. Cerra
Retablo de Sijena

Retablo de Sijena

Las pinturas de este retablo realizadas sobre tabla y con la técnica del temple se pueden datar a finales del siglo XIV. Su origen es el Monasterio de Santa María de Sijena situado en la provincia española de Huesca. Sin embargo, en la actualidad esta obra artística medieval no se encuentra allí, sino en el Museo Nacional de Arte de Cataluña ubicado en Barcelona.

Para la gran mayoría de estudiosos de ese periodo artístico, las tablas pintadas de este retablo fueron obra del artista Jaume Serra y su hermano Pere, si bien algún historiador del arte español se las atribuye al maestro Ramón des Torrens.

Sea obra de un pintor o de otro, lo cierto es que se trata de una obra propia del arte gótico de clara influencia de la escuela sienesa. Algo que se manifiesta en la característica línea que encierra a las figuras y también en el modelo que se utilizó. Es decir, una virgen muy rubia, que porta una corona y que no lleva manto. Esta iconografía está estrechamente emparentada con las obras del pintor italiano Simone Martini, quién con obras tan exquisitas como su Anunciación es el máximo representante de esta corriente artística.

El estilo de la pintura gótica sienesa fue introducido en España por los artistas Ferrer Bassa y el citado Ramón des Torrens, ambos pintores que trabajaron mucho en la región de Aragón, por ejemplo en las capillas cristianas del Castillo de la Aljafería, aunque sus obras más famosas en su tiempo no han llegado hasta nuestros días.

No obstante, pese a no haber documentación escrita que permita la adjudicación concreta a un artista u otro, en el Retablo del Monasterio de Santa María de Sijena se ven ciertas características formales que hacen pensar que es obra de los hermanos Serra. Por ejemplo, al observar esta pintura se puede ver que sus creadores no se preocuparon nada en absoluto por ningún problema espacial. Y su interés principalmente recayó sobre la representación de la figura de la Virgen, que se integra en una composición bastante equilibrada. Unas características que permiten establecer claros paralelismos con otras obras conocidas de Jaume Serra, como es la tabla de la Virgen de la Leche de Tobed.

Y es que todo el retablo está protagonizado por la representación de la Virgen María, que aparece en el centro. Mientras que a sus lados se pintaron varias escenas de su vida, desde el momento de la Anunciación por parte del Arcángel San Gabriel hasta su muerte y posterior coronación.. Y en la base de todo el retablo, aparece el banco o predela, en el cual están pintados los milagros de la Eucaristía, en torno a la tabla central que representa la Última Cena.