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Catedral de San Pablo de Londres

Publicado por A. Cerra
Catedral de San Pablo de Londres

Catedral de San Pablo de Londres

La capital británica en el año 1666 sufrió un devastador incendio que dejó calcinado o muy dañado gran parte del centro de Londres. Pronto las autoridades emprendieron los trabajos para recuperar muchos de sus edificios, y uno de ellos era la Catedral de San Pablo, cuyo encargo recayó en manos de Christopher Wren.

Este personaje se puede considerar como una de las grandes personalidades de aquel momento. Y no sólo se le encargaron los trabajos de recuperación del templo catedralicio londinense, también fue nombrado miembro de la Comisión Real para la reconstrucción del centro administrativo de Londres, la denominada City. Pero es que además, también se confió en su talento y su enorme capacidad de trabajo para construir entre los años 1670 y 1711, 52 iglesias de la ciudad que habían quedado devastadas por las llamas.

En el caso de la Catedral de San Pablo, los trabajos se prolongaron durante 35 años, los que van de 1675 hasta 1710. Y es que el proyecto no fue sencillo. Para empezar porque la idea inicial de Christopher Wren era la de construir un templo de planta central a partir de una cruz griega, en la que no hubiera división en naves y el espacio central se cubriera con una gran cúpula.

La comisión que había de supervisar el proyecto, lo rechazó y recomendó el empleo de la cruz latina. Por supuesto que Wren se vio obligado a plantear modificaciones, sin embargo el resultado final acabó siendo una mezcla de ambas ideas, y entre ellas destaca el espíritu barroco de la construcción, cuyo elemento más emblemático es la cúpula central rodeada por un tambor con peristilo. Una cúpula cuyos referentes son la gran cúpula de San Pedro del Vaticano proyectada por Bramante y ejecutada por Miguel Ángel, la mayor de toda la Cristiandad. Y por supuesto, también la más bella, il Cupulone de Brunelleschi en la Catedral de Santa María de las Flores de Florencia.

El hecho es que en la actualidad, varios siglos después, la cúpula de la Catedral de San Pablo, sigue siendo uno de los iconos del paisaje urbano de Londres. Y eso que su ejecución no era nada sencilla. Sin embargo, la formación de Wren como arquitecto y también como matemático, le ayudó a resolver uno tras otro los problemas que le fueron surgiendo.

Hay que tener en cuenta que Christopher Wren junto al científico Robert Hooke fueron los fundadores de la, hasta hoy, prestigiosa Royal Society, y desde ahí emprendieron una investigación concienzuda y sistemática sobre la teoría de la estática. Y era un perfecto conocedor de las teorías, no solo artísticas, sino también matemáticas del pasado, entre ellos los tratados de Galielo Galilei e Isaac Newton, todo lo cual era capaz de adaptar a sus diseños arquitectónicos. Y es que para él esta rama de la ciencia y de la matemática era imprescindible a la hora de acometer sus proyectos. De hecho, criticaba que en su época los arquitectos se dedicaran más a cuestiones ornamentales que a la geometría, que a su entender era la esencia de la arquitectura. Y sin duda, la Catedral de San Pablo es la máxima expresión de este principio.