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Torres de Serranos

Publicado por A. Cerra

Torre de los Serranos de Valencia

Las Torres de Serranos, junto a las Torres de Quart, son los únicos restos quedan en pie de lo que fueron las murallas medievales de la ciudad de Valencia.

De ambas, las de Serranos son más antiguas, y además también fueron las que protegía la puerta principal de la ciudad ya que estaba en dirección a Zaragoza y Barcelona. Por esa razón, tiene más elementos ornamentales. Si bien muchos se han perdido a lo largo de la dilatada historia del monumento.

Además también tiene un aspecto diferente ya que las Torres de Quart son de aspecto circular, mientras que las Torres de los Serranos son de planta poligonal. Unas torres que en su interior tenían tres plantas abovedadas y que se construyeron para flanquear la principal puerta a la ciudad, abierta en el muro mediante un amplio arco de medio punto. Una forma para el arco un tanto curiosa, ya que hay que tener en cuenta las fechas de construcción de la obra, a finales del siglo XIV, en pleno esplendor del arte gótico, que además en Valencia tiene tan magníficos ejemplos arquitectónicos como su hermosa Lonja.

En concreto se sabe que las Torres de Serranos se levantaron entre los años 1392 y 1398. Y el maestro de obras fue Pere Balaguer. Como la función principal había de tener un carácter defensivo, se creó una obra de gruesos muros de mampostería que se luego se recubrió de escuadrados sillares de piedra para darle un aspecto más protocolario, ya que pronto se celebraron aquí los desfiles más pomposos e importantes de las autoridades. Y también por eso se incluyeron elementos decorativos de clara inspiración gótica.

Torres de Quart en Valencia

No obstante, hay que decir que las torres y la puerta no solo han cumplido con esas funciones. También fueron prisión de nobles, momento en el que se hicieron sustanciales cambios en su apariencia, sobre todo en lo referente a sus ventanas y aspecto externo. Sin embargo, aquel uso carcelario las salvó del derribo en el siglo XIX, al igual que ocurrió con las Torres de Quart, ya que por entonces se decidió derruir toda la muralla valenciana para favorecer su crecimiento urbano.

Y aún posteriormente tuvo un uso mucho más curioso. Durante los años de la Guerra Civil Española, Valencia permaneció bajo el mando del gobierno republicano, el cual dio la orden de salvaguardar las obras del Museo del Prado de Madrid trasladándolas de la capital. Y así algunas fueron guardadas en el interior en las Torres de Serranos de Valencia. Lo cual también supuso reformas para el acondicionamiento y la protección de aquellos tesoros artísticos. Pero en este caso, bien merecían la pena aquellos cambios.