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Frutero, vaso y limón de Juan Gris

Publicado por A. Cerra
Frutero, vaso y limón de Juan Gris

Frutero, vaso y limón de Juan Gris

El pintor español Juan Gris (1887 – 1927) es uno de los máximos exponentes de la pintura cubista en Europa, un movimiento de las primeras vanguardias que fue concebido por Pablo Picasso y Georges Braque.

Este lienzo titulado en el explícito título de Frutero, vaso y limón es un buen ejemplo del tipo de cubismo que desarrolló Juan Gris a lo largo de toda su producción pictórica. Aquí podemos ver que numerosos planos van apareciendo entrecortados, y hasta usa el sombreado y el punteado, lo cual fue una especie de sello particular.

El aspecto global de la tela puede recordar los diseños textiles, y es que a principios del siglo XX la pintura, entre otras cosas, sirvió para la creación de ciertos diseños de moda e incluso mobiliario. De alguna forma, el arte de la pintura está dejando de tener un valor intrínseco, y va a servir como motivo de inspiración para otras muchas disciplinas creativas.

Para Juan Gris, lo primero era la idea y luego atendía a la imagen de la cosa a representar, y estaba seguro que la imagen iba a acabar pareciéndose a la idea, que para él era la verdadera realidad.

Según sus ideas sobre el arte, un cuadro es por naturaleza una arquitectura plana y coloreada, y los elementos fundamentales para su construcción son los colores, las formas lineales y la unidad estética entre unos y otras. Y en cuanto a la función de los cuadros se trata de representar. Por eso en todas sus obras siempre hay una intención figurativa, y los elementos son reconocibles. No obstante, él hace una construcción o interpretación de la realidad aparencial por medios pictóricos.

Investiga simultáneamente el carácter constructivo y figurativo de cada elemento pintado, de ahí sus característicos enrejados y los planos entrecortados. E intenta darle movimiento y dinamismo a sus imágenes gracias a composiciones piramidales y romboidales que genera a base de líneas oblicuas que se van cortando unas con otras. Y a estos planos que genera a base de líneas les aplica el color, el cual va superponiendo, de manera que consigue darle profundidad a la imagen.

Otra de las herramientas que suele emplear en sus composiciones cubistas es la incorporación al lienzo de otros materiales, es decir, hace collages, y en muchas ocasiones utiliza papel de diarios. También en esta obra vemos un periódico, pero en este caso se encuentra pintado, aunque trata de texturizarlo lo máximo posible para que parezca papel de verdad. Y no es lo único que texturiza muy bien, ya que otro rasgo identificativo en las obras de Gris es su capacidad para dar textura a los elementos cotidianos de madera que pinta en sus obras.

Pero si algo sabe hacer a la perfección es materializar uno de los preceptos fundamentales de la pintura cubista, y éste no es otro que destruir y reconstruir los objetos jugando con sus volúmenes y sus perfiles geométricos, siempre siendo capaz de que esos objetos sean plenamente legibles por parte del espectador.