Pareja amorosa desigual de Cranach
Este óleo sobre tabla del pintor alemán Lucas Cranach pintado en 1517 se conserva en el Museo Nacional de Arte de Catalunya en Barcelona. Una obra en la que este artista nos vuelve a demostrar que es el autor de algunas de los mejores cuadros del Renacimiento alemán gracias a pinturas como La Edad de Oro.
El artista pintó en varias ocasiones una imagen semejante donde un hombre de avanzada edad parece encapricharse de una muchacha más joven, y esta se deja querer pero a cambio le roba la bolsa. Sin duda la moralina está clara, criticando la lujuria que vuelve tonto al hombre y también la codicia de la mujer.
Es un tipo de escenas que no solo recreó Cranach, en realidad fue un tema muy repetido por otros artistas de países donde triunfó la Reforma luterana. Y Cranach hizo variaciones sobre el mismo tema, ya que si bien aquí es un viejo y una joven, también hay otros cuadros aparece una pareja de jóvenes pero también una mujer mayor que es la que se cobra el dinero por permitir esa relación.
A veces estos cuadros tienen un aire grotesco, aunque eran escenas de prostitución de lo más habitual en la sociedad de la época. Lo cierto es que este tipo de escenas los podemos considerar una gran diferencia entre el arte renacentista que se hace en Italia y el que se practica en otros lugares del norte de Europa. Ya que mientras en el país trasalpino se inspiran en temas mitológicos y religiosos para plasmar la belleza y la armonía. En otros lugares han aprendido mucho de los grandes maestros italianos, pero esas enseñanzas las vuelcan en otras escenas populares y con fines más expresivos.
En eso se convirtió en un grandísimo maestro Cranach, quien todavía tiene en su arte muchas reminiscencias de la pintura gótica. Sin embargo, por el espíritu de su obra hay que considerarlo un artista del Renacimiento. Y es que, pese a sus toques grotescos, exagerados y casi caricaturescos a veces, la verdad es que él buscó plasmar la belleza. E incluso podemos decir que creó el canon del desnudo femenino en el arte alemán, donde durante mucho tiempo se imitaron sus mujeres de figura estilizada, con piernas muy largas y pechos pequeños, como la que vemos en su célebre Venus y Cupido.
Por cierto, otra característica del arte alemán son algunas firmas de los artistas. Por ejemplo, el gran Albert Durero firmaba muchas de sus obras con un anagrama formado por la A y la D. Y también Lucas Cranach con un anagrama, pero en este caso se trata de una serpiente alada con las alas hacia arriba. Así lo hizo hasta el año 1537. Sin embargo en esa fecha falleció su hijo, y a partir de entonces las alas las dispuso hacia abajo.