El yacimiento de Copán
A veces se piensa que los grandes vestigios de la civilización maya solo se pueden ver en México con lugares como Chichén Itza o Tulum, o en el vecino territorio de Guatemala con el maravilloso conjunto arqueológico de Tikal al frente.
Sin embargo, los restos de aquella cultura se pueden visualizar en otros lugares como Belice o el propio país de Honduras, donde precisamente se encuentra la ciudad maya de Copán, en un muy aceptable estado de conservación.
En el interior del yacimiento hay varios lugares muy interesantes. Uno de ellos es la Gran Plaza de la Estelas. Su nombre se debe a la serie de estelas grabadas que se descubren aquí, y que constituyen un conjunto de escultura maya de lo más singular. Unas esculturas que además hay que imaginarse que originalmente estaban pintadas de muy vivos colores, de los cuales quedan restos en algunas de ellas.
También se puede ver el recinto del Juego de Pelota, que tan habitual es en otros muchos yacimientos de la América prehispánica. Y el de Copán es ni más ni menos que el segundo Juego de Pelota más grande que se ha hallado.
Otro elemento destacado es la Escalinata de los Jeroglíficos, la cual se supone que conducía hasta el palacio real de Yax Pasaj Chan, que sería el último rey (o gobernador) que tuvo Copán, o al menos el último del que conozcamos su nombre. Ese dato se puede conocer por la propia escalinata compuesta por más de 60 escalones entorno a los cuales hay cientos de jeroglíficos, cuyo significado se ignora en algunos casos, se especula en otros y por último también se han descifrado algunos para llegar a la conclusión de que ahí se cuenta la historia de la monarquía de Copán.
No acaba aquí el interés de Copán. También hay dos plazas elevadas sobre el conjunto. En esas elevaciones se puede ver el Altar Q, junto al que se hallaron restos de jaguares y guacamayos, por lo que sería escenario de curiosos rituales. Y también allí está el restaurado Templo de la Meditación.
Todavía quedarían más restos interesantes repartidos por la extensión del yacimiento hondureño. Por ejemplo, se ha conservado la zona del cementerio o quedan visibles los túneles de Rosalila, gracias a los que se puede ver estructuras subterráneas.
En definitiva, se puede decir que Copán es un yacimiento muy interesante. Una antigua urbe que según los investigadores de la cultura maya se debería considerar como un centro espiritual y también político, que estaría habitado casi en exclusiva por las familias aristocráticas de este territorio.