El Castillo de Tulum
El llamado “Castillo” de Tulum es el edificio más emblemático de este gran yacimiento arqueológico de la civilización maya que se encuentra en México, concretamente en el estado de Quintana Roo.
Este edificio del Castillo solo es comprensible por su ubicación a orillas del mar Caribe. Un emplazamiento que en realidad convierte a todo el yacimiento de Tulum en un lugar diferente a otros restos mayas, en muchos casos muchísimo más completos como es Chichen Itzá en el mismo estado de Quintana Roo pero al interior de la Península de Yucatán, o el increíble conjunto de Tikal ya en tierras de Guatemala.
Volviendo a Tulum, el Castillo también es uno de los edificios más antiguos del conjunto, en un yacimiento donde algunos restos datan del siglo VI, si bien la mayoría de construcciones se levantaron entre los años 1200 y 1450, o sea, durante el periodo postclásico maya. Y todo ello fue deshabitado aproximadamente más o menos un siglo después de la llegada de los españoles.
El descubrimiento de Tulum y los primeros estudios a mediados del siglo XIX se los debemos a los arqueólogos Frederick Catherwood y John Lloyd Stephens, los cuales previamente habían trabajado en lugares en otros yacimientos mayas como el de Copán en Honduras, o el de Uxmal en México, además del increíble conjunto del Palenque donde han aparecido restos tan valiosos como el Panel de los Esclavos o el Templo de las Inscripciones.
No obstante no fueron ellos quienes dieron con las claves para comprender el Castillo de Tulum. Un imponente edificio a las mismas orillas del mar, cuyos muros de piedra caliza se elevan 12 metros, a lo que hay que sumar el promontorio rocoso natural que le sirve de base. Es decir, es un punto ideal para ver el mar alrededor. Si bien, su función no sería tanto vigilar, como guiar a los navegantes. O sea, servir de faro.
Toda esta costa está protegida por un larguísimo arrecife de coral, y para los marinos mayas era un obstáculo. Por eso navegaban mar adentro en paralelo, y la presencia del Castillo de Tulum les indica un canal por el que podían acceder a la costa. Es más cuando veían las dos ventanas iluminadas de la construcción sabían que era el momento de virar y dirigirse hacia tierra sin naufragar. Algo que ignoraban los marinos españoles cuando llegaron, por eso se sabe que ellos sí naufragaron.
Y es que Tulum era un puerto comercial muy importante para los mayas, como atestiguan vestigios hallados de mercancías llegadas de toda Centroamérica.