Sombrerería de Macke
Esta obra de August Macke se conserva en Essen, en su Alemania natal. Este lienzo pintado con la técnica del óleo lo realizó en el año 1914, el mismo año de su temprana muerte a la edad de 27 años.
Sería especular intentar saber hasta donde hubiera llegado como artista August Macke, si su vida hubiera sido más larga, y no hubiera tenido la mala suerte de morir en el frente de batalla durante la Primera Guerra Mundial. Porque lo cierto es que las obras de Macke y su producción a lo largo de su corta vida resumen por sí mismas gran parte de la historia de las vanguardias históricas de los primeros años del siglo XX.
El pintor nacido en un pueblo cercano a Bonn en el año 1887, realizó gran parte de su obra en tierras alemanas, si bien hizo varios viajes decisivos para comprender su arte, sobre todo las varias estancias que tuvo en París donde conoció a los artistas más influyentes de la época, y también el viaje que hizo junto a Paul Klee en el mismo año de su muerte, y que tanto para Klee como para Macke fue una especie de viaje iniciático en el que descubrieron otras luces y otros colores.
Precisamente el color es muy importante en la obra de Macke. Tras unos inicios en los que sigue muy de cerca la pintura impresionista, y la postimpresionista sobre todo de Paul Cezanne y el Puntillismo de Georges Seurat, pronto conoce el emergente Fauvismo de Henri Matisse. Una pintura que le atrajo enormemente, de hecho dejo dicho que para él lo que más le interesaba de la pintura era observar los movimientos de los colores.
Pero no acaban aquí las influencias de Macke. Este pintor era muy amigo del también artista alemán Franz Marc, y éste a su vez tenía intereses artísticos comunes con el ruso Wassily Kandinsky. Entre los tres crearon en torno a 1910 el grupo Der Blaue Reiter (El Jinete Azul) cuyas obras son el máximo exponente del movimiento del Expresionismo Alemán, y además aquellas obras son el germen de lo que en pocos años Kansdinsky daría a conocer como la pintura abstracta.
Lo cierto es que Macke coincidía con ellos en la idea de mostrar los sentimientos del autor a través de la pintura, a través de sus formas, sus colores e incluso sus texturas. Pero él no evolucionó hacia lo abstracto, ya que pensaba que para plasmar los estados de ánimo del artista, éste debía contar con referentes basados en la vida cotidiana y que fuera reconocibles. Por ello la carga teórica de sus compañeros no le atraía en exceso.
Sin embargo, en otro viaje a París en 1912 conoció a Robert Delaunay y obra catalogada dentro del estilo Orfismo. Y eso fue otra de sus grandes revelaciones e influencias. De hecho, esta obra Sombrería y otras en las que se dedicó a pintar escaparates urbanos, están consideradas como su versión de las Ventanas de Delaunay.
La Sombrería de Macke es una obra que refleja su fascinación por la vida urbana y la moda. La pintura muestra una tienda de sombreros con una variedad de estilos y colores. Los sombreros están dispuestos de manera que crean un ritmo visual, y los colores vibrantes reflejan la energía de la ciudad. Macke también incluye figuras humanas en la pintura, pero están en segundo plano, lo que sugiere que el enfoque principal de la obra es la moda y la vida urbana en sí misma.
Macke tenía un talento especial para capturar la esencia de su tiempo y lugar. Su uso de colores brillantes y formas geométricas refleja la influencia del Fauvismo y el Orfismo, pero también muestra su propio estilo único. A pesar de su corta carrera, Macke dejó una huella indeleble en el mundo del arte, y su influencia se puede ver en los trabajos de muchos artistos posteriores.
La Sombrería es un ejemplo perfecto de cómo Macke combinó sus influencias artísticas con su propio estilo para crear obras que son a la vez únicas y representativas de su tiempo. Aunque su vida fue corta, su legado perdura en su arte, que sigue siendo estudiado y admirado por los amantes del arte en todo el mundo.